Magdalenas es la traducción para muffins. Requiere concentración, pero es una buena manera de enfrentarse a este mundo en donde todo lo que sube, no baja. De granola y maní acaramelado.

12 unidades • 45 minutos

  • 1¾ taza de harina todo uso
  • 1 taza de azúcar
  • 2 cucharaditas de polvos de hornear
  • ½ cucharadita de bicarbonato de sodio
  • ¼ cucharadita de sal
  • 1 taza de leche
  • 2 huevos
  • 1 cucharadita de vainilla
  • 3 cucharadas de mantequilla
  • 3 cucharadas de mantequilla de maní
  • 3 cucharadas de miel de palma
  • ¼ taza de maní sin sal, picado
  • 1 taza de granola (sin pasas)

Prende el horno y déjalo calentar a fuego alto. En un sartén pon a calentar el maní, el granola y ¼ de taza de azúcar. Revolviendo siempre, agrega 2 cucharadas de agua hirviendo y 3 cucharadas de miel de palma. Revuelve hasta que el azúcar comienze a dorarse y a ponerse pegote. No dejes que se te queme. Cuando esté listo deja reposar la mezcla sobre una tabla.

En un bowl mezcla bien todos los ingredientes secos. En otro recipiente mezcla la leche, los huevos y la vainilla. En un sartén a fuego bajo, derrite juntas la mantequilla y la mantequilla de maní. Agrégala a la mezcla líquida y revuelve un poco para que se incorpore.

Con un poco de mantequilla y toalla nova, engrasa cada uno de los huecos de un molde para 12 muffins. Luego echa la mezcla líquida en el bowl con los ingredientes secos, y con una espátula, incorpora todo suavemente, hasta que no queden restos de harina sola.

El granola con maní en la tabla ya debiera estar frío y semi duro. Córtalo en pedazos con un cuchillo y échalos a la mezcla.

Con una cuchara sopera, echa la mezcla en cada hueco del molde casi hasta el borde. Hornea por 15 minutos (a fuego alto los primeros 7 y a fuego medio el resto). No abras el horno hasta que estén listos. Cumplidos los 15 minutos, para asegurarte que están listos, mete un mondadiente o un palito en uno de los queques y si sale seco, lo has logrado.

Aunque todavía te falta desmoldarlos. Retira y apaga el horno. Deja reposar por 3 minutos. Con un instrumento plano de goma (mezquino o espátula) separa cada muffin del borde. Compueba si están muy pegados, girándolos suavemente como la manilla de una puerta.

Pónlos en una fuente y deja enfriar. Duran hasta dos días.

Dedicado a Barbarita.

• Si vas a imprimir esta receta, házlo en una hoja que ya hayas usado por un lado.