Desgranaba doña Berta los porotitos de la huerta.

Pasa que como hay que remojarlas desde la noche anterior, y uno generalmente no anda pensando en el almuerzo del día siguiente, cuando dan ganas de porotos o garbanzos a la hora que baja el hambre, ya es muy tarde. Bueno he aquí el dato:

Toma un frasco de vidrio, esos de mermelada o de pepinillos (si no tienes, a acumular) y llénalo hasta la mitad* (1 taza aprox.) con las legumbres elegidas. Luego llénalo de agua y tapando la boca con la mano agítalo unos segundos para que se enjuaguen y deja salir el agua. Repite unas tres veces. Luego llénalo de agua hasta el tope, ciérralo bien y ponlo en el refrigerador. Duran como 1 semana, a veces más, disponibles a toda hora para cocinarlos.

* Las legumbres se hinchan con el agua, por lo que si llenas mucho el tarro, se apretarán tanto unos con otros que es imposible sacarlos.