Un clásico, pero en pote. Y crocante.

4 personas • 30 minutos

  • 2 plátanos, en cubitos
  • 1 taza de granola
  • 3 cucharadas de mantequilla
  • 1 cucharada de azúcar
  • miel de palma

Prende el horno. En la 1-2-3 o mini-pimer muele el granola. En un sartén a fuego bajo, derrite 2 cucharadas de mantequilla. Luego mézclala con el granola molido, incorporándola de a poco, para que reparta uniformemente. Reparte la mezcla en 4 posillos para horno y aplástala un poco.

Hornea por unos 10 minutos, hasta que se dore, revisando siempre para que no se te vaya a quemar.

Por mientras en el mismo sartén donde derretiste la mantequilla, derrite la cucharada restante. Agrega el plátano, espolvoréale azúcar  y dóralo unos 5 minutos, hasta que se ponga más oscuro. Al final échale miel de palma, cuanto quieras. Deja enfriar.

En los potes con el granola, ya fríos, reparte el plátano y déjalos en el refrigerador hasta servir.